
Katmandú, 12 sep (Prensa Latina) Al menos 34 personas murieron y mil 368 resultaron heridas por las recientes manifestaciones que mantienen a Nepal en una crisis luego de la renuncia del primer ministro KP Sharma Oli, informaron autoridades sanitarias.
El portavoz del Ministerio de Salud, Dr. Prakash Budhathoki, indicó que la mayoría de los heridos ya fueron dados de alta tras recibir tratamiento.
Mientras, el presidente Ramchandra Paudel urgió a poner fin a la crisis que ahoga a Nepal, y dijo que emplea todos sus esfuerzos en consulta con los involucrados para encontrar una salida dentro del marco constitucional a la difícil situación actual de la nación del Himalaya.
Por otra parte, el Ejército Nepalí anunció que, para evitar nuevos desórdenes, permanecerá la restricción de circulación durante todo el día y el toque de queda nocturno en Katmandú, Bhaktapur y Lalitpur.
También aseguró que frustró un intento de fuga de 192 reclusos de la prisión del distrito de Rajbiraj y la captura de otros detenidos, entre estos siete que huían hacia la India.
Además, la policía de Nepal instó a la ciudadanía a devolver cualquier arma, vehículo, dispositivo de comunicación, chaleco antibalas, uniformes u otros artículos confiscados o encontrados durante las protestas.
El lunes pasado, con el pretexto de una prohibición de varias redes sociales, se desató una sangrienta protesta que en su segundo día y luego de la dimisión de Oli desembocó en un caos, con muertos y heridos, ataques a funcionarios y sus familiares, incendios de instituciones parlamentarias y gubernamentales, medios de prensa y residencias, ante la inacción de las fuerzas de seguridad.